Versículos bíblicos sobre Conexión
Versículos de la Biblia sobre Conexión
La Escritura revela que la conexión no es meramente un deseo humano, sino un principio divinamente ordenado. Explorar versículos bíblicos sobre conexión desvela el corazón de Dios por la unidad, la comunión y la interdependencia. Desde el vínculo entre Cristo y Su iglesia hasta el llamado a amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos, la Biblia enfatiza el rol vital de la conexión en nuestros viajes espirituales. Entender estos versículos ilumina cómo estamos diseñados para prosperar en relación con Dios y unos con otros, fomentando compasión, empatía y una comprensión más profunda de Su amor. Que estas Escrituras te guíen hacia la construcción de conexiones significativas arraigadas en la fe, la esperanza y un propósito compartido, enriqueciendo tu vida y glorificando a Dios.
Versículos más útiles
Comienza tu estudio con estos pasajes cuidadosamente seleccionados
Y los hijos de Merari: Mahali, y Musi: estas son las familias de Leví por sus linajes.
Y de la tribu de Benjamín, á Gibeón con sus ejidos, á Geba con sus ejidos,
A Anathoth con sus ejidos, á Almón con sus ejidos: cuatro villas.
Scripture Passages
Y concibió Bilha, y parió á Jacob un hijo.
Y los hijos de Zilpa, sierva de Lea: Gad, y Aser. Estos fueron los hijos de Jacob, que le nacieron en Padan-aram.
Y vino Jacob á Isaac su padre á Mamre, á la ciudad de Arba, que es Hebrón, donde habitaron Abraham é Isaac.
Y la barra del medio pasará por medio de las tablas, del un cabo al otro.
¡OH quién te me diese como hermano que mamó los pechos de mi madre; de modo que te halle yo fuera, y te bese, y no me menosprecien!
Toda la congregación de Israel le sacrificará.
Y los hijos de Aser: Jimna, é Ishua, é Isui, y Beria, y Sera, hermana de ellos. Los hijos de Beria: Heber, y Malchîel.
La quinta á Nethanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
Abigail engendró á Amasa, cuyo padre fué Jether Ismaelita.
E hizo las lazadas de color de jacinto en la orilla de la una cortina, en el borde, á la juntura; y así hizo en la orilla al borde de la segunda cortina, en la juntura.
Y los hijos de Zabulón: Sered, y Elón, y Jahleel.
Y fueron sus hermanos á apacentar las ovejas de su padre en Sichêm.
Y venía Isaac del pozo del Viviente que me ve; porque él habitaba en la tierra del Mediodía;
Pero Saúl, viendo y considerando que Jehová era con David, y que su hija Michâl lo amaba,
Hijo de Mahali, hijo de Musi, hijo de Merari, hijo de Leví.
Los hijos de Chûs: Seba, Havila, Sabtha, Raema, y Sabtechâ. Y los hijos de Raema: Seba y Dedán.
Y será que de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrá toda carne á adorar delante de mí, dijo Jehová.
Y ahora tus dos hijos Ephraim y Manasés, que te nacieron en la tierra de Egipto, antes que viniese á ti á la tierra de Egipto, míos son; como Rubén y Simeón, serán míos:
Los hijos de Benjamín por sus familias: de Bela, la familia de los Belaitas; de Asbel, la familia de los Asbelitas; de Achîram, la familia de los Achîramitas;
Estos pues con sus hijos asistían: de los hijos de Coath, Hemán cantor, hijo de Joel, hijo de Samuel;
Yo soy de mi amado, y conmigo tiene su contentamiento.
Y harás á la puerta del tabernáculo una cortina de cárdeno, y púrpura, y carmesí, y lino torcido, obra de bordador.
UN varón de la familia de Leví fué, y tomó por mujer una hija de Leví:
Todos estos fueron las doce tribus de Israel: y esto fué lo que su padre les dijo, y bendíjolos; á cada uno por su bendición los bendijo.
Los hijos de Asena, los hijos de Meunim, los hijos de Nephusim;
Y Aminadab engendró á Nahasón, y Nahasón engendró á Salmón;
Los hijos de Zabulón por sus familias: de Sered, la familia de los Sereditas; de Elón, la familia de los Elonitas; de Jalel, la familia de los Jalelitas.
La quinta á Nethanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
Elcana, é Isías, y Azareel, y Joezer, y Jasobam, de Coré;
Y David tuvo deseo, y dijo: ¡Quién me diera á beber del agua de la cisterna de Beth-lehem, que está á la puerta!
Y llamó el nombre de aquel lugar Beth-el, bien que Luz era el nombre de la ciudad primero.
Estos son los hijos de Ismael, y estos sus nombres, por sus villas y por sus campamentos; doce príncipes por sus familias.
Y los ejidos de las ciudades que daréis á los Levitas, serán mil codos alrededor, desde el muro de la ciudad para afuera.
Mi señor preguntó á sus siervos, diciendo: ¿Tenéis padre ó hermano?
Y yo saldré y estaré junto á mi padre en el campo donde estuvieres: y hablaré de ti á mi padre, y te haré saber lo que notare.
Dióse además la mitad de Galaad, y Astaroth, y Edrei, ciudades del reino de Og en Basán, á los hijos de Machîr, hijo de Manasés, á la mitad de los hijos de Machîr conforme á sus familias.
Empero se fortificó Abías; y tomó catorce mujeres, y engendró veintidós hijos, y dieciséis hijas.
Esta es la herencia de los hijos de Gad, por sus familias, estas ciudades con sus villas.
De la tribu de Nephtalí, Nahabí hijo de Vapsi.
Las cuales piedras eran conforme á los nombres de los hijos de Israel, doce según los nombres de ellos; como grabaduras de sello, cada una con su nombre según las doce tribus.
A través de explorar estos versículos, hemos presenciado la profunda importancia de la conexión tejida a lo largo del tejido de la fe. Desde el vínculo íntimo entre Dios y la humanidad hasta las relaciones vitales dentro de la comunidad de creyentes, la Biblia enfatiza que no estamos destinados a viajar solos. Estos pasajes revelan que la conexión auténtica fomenta fuerza, proporciona consuelo y profundiza nuestra comprensión del amor de Dios. Ya sea a través de la oración, la comunión o actos de servicio, nutrir nuestras conexiones es esencial para el crecimiento espiritual y vivir una vida que refleje a Cristo. Toma tiempo para reflexionar sobre estos versículos, considera las conexiones en tu propia vida y busca oportunidades para construir puentes de comprensión y apoyo. Al fomentar intencionalmente relaciones significativas, no solo enriquecemos nuestras propias vidas, sino que también contribuimos a un mundo más compasivo y conectado, reflejando el corazón de la intención de Dios para la humanidad.