Versículos bíblicos sobre Amistad
Versículos bíblicos sobre Amistad
La amistad, un don tejido en la tela de la humanidad, encuentra una resonancia profunda dentro de las Escrituras. Explorar versículos bíblicos sobre la amistad revela el plano divino para una conexión genuina, apoyo mutuo y lealtad inquebrantable. A través de estos textos sagrados, descubrimos que la amistad no es meramente una construcción social, sino un lazo espiritual que refleja la propia naturaleza relacional de Dios. Comprender la amistad a través del lente de la Escritura nos permite cultivar relaciones más profundas y significativas, fundamentadas en amor, honestidad y fe compartida. Nos guía a ser mejores amigos, a buscar consejo sabio y a reflejar el amor de Cristo en nuestras interacciones con los demás, enriqueciendo nuestras vidas y glorificando a Dios.
Versículos más útiles
Comienza tu estudio con estos pasajes cuidadosamente seleccionados
Yo voy el camino de toda la tierra: esfuérzate, y sé varón.
Guarda la ordenanza de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, y sus derechos y sus testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moisés, para que seas dichoso en todo lo que hicieres, y en todo aquello á que te tornares;
Y entonces se mostrará la señal del Hijo del hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo, con grande poder y gloria.
Scripture Passages
También sobre su cama es castigado con dolor fuerte en todos sus huesos,
Todos los que están conmigo te saludan. Saluda á los que nos aman en la fe. La gracia sea con todos vosotros. Amén. A Tito, el cual fué el primer obispo ordenado á la iglesia de los Cretenses, escrita de Nicópolis de Macedonia.
Y dijeron los varones á Lot: ¿Tienes aquí alguno más? Yernos, y tus hijos y tus hijas, y todo lo que tienes en la ciudad, sácalo de este lugar:
Entonces salió Lot, y habló á sus yernos, los que habían de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de este lugar; porque Jehová va á destruir esta ciudad. Mas pareció á sus yernos como que se burlaba.
¿No tenemos potestad de traer con nosotros una hermana mujer también como los otros apóstoles, y los hermanos del Señor, y Cefas?
¿O sólo yo y Bernabé no tenemos potestad de no trabajar?
Mas sus discípulos, oyendo estas cosas, se espantaron en gran manera, diciendo: ¿Quién pues podrá ser salvo?
Pues de su grado han dado conforme á sus fuerzas, yo testifico, y aun sobre sus fuerzas;
De manera que exhortamos á Tito, que como comenzó antes, así también acabe esta gracia entre vosotros también.
Y en la ley Moisés nos mandó apedrear á las tales: tú pues, ¿qué dices?
Porque la ley constituye sacerdotes á hombres flacos; mas la palabra del juramento, después de la ley, constituye al Hijo, hecho perfecto para siempre.
Las palabras de la boca del sabio son gracia; mas los labios del necio causan su propia ruina.
Oh Dios, oye mi oración; escucha las razones de mi boca.
ESCUCHA, oh Dios, mi oración, y no te escondas de mi súplica.
No temas, gusano de Jacob, oh vosotros los pocos de Israel; yo te socorrí, dice Jehová, y tu Redentor el Santo de Israel.
Alegad por vuestra causa, dice Jehová: exhibid vuestros fundamentos, dice el Rey de Jacob.
No tuve reposo en mi espíritu, por no haber hallado á Tito mi hermano: así, despidiéndome de ellos, partí para Macedonia.
Mas si el santificante redimiere su casa, añadirá á tu valuación el quinto del dinero de ella, y será suya.
Y si el que santificó la tierra quisiere redimirla, añadirá á tu estimación el quinto del dinero de ella, y quedaráse para él.
No creáis en amigo, ni confiéis en príncipe: de la que duerme á tu lado, guarda, no abras tu boca.
Así que, si os dijeren: He aquí en el desierto está; no salgáis: He aquí en las cámaras; no creáis.
El hombre sabio es fuerte; y de pujante vigor el hombre docto.
Tal será el conocimiento de la sabiduría á tu alma: si la hallares tendrá recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada.
Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos: que Jehová tu Dios es el que va contigo: no te dejará ni te desamparará.
La luna y las estrellas para que dominasen en la noche, porque para siempre es su misericordia.
Al que hirió á Egipto en sus primogénitos, porque para siempre es su misericordia.
Si sois vituperados en el nombre de Cristo, sois bienaventurados; porque la gloria y el Espíritu de Dios reposan sobre vosotros. Cierto, según ellos, él es blasfemado, mas según vosotros es glorificado.
Y si el justo con dificultad se salva, ¿á dónde aparecerá el infiel y el pecador?
EN Jehová he confiado; ¿cómo decís á mi alma: Escapa al monte cual ave?
El labio de verdad permanecerá para siempre: mas la lengua de mentira por un momento.
Y era viuda de hasta ochenta y cuatro años, que no se apartaba del templo, sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones.
Y ellos como lo oyeron, glorificaron á Dios, y le dijeron: Ya ves, hermano, cuántos millares de Judíos hay que han creído; y todos son celadores de la ley:
Bienaventurado el hombre á quien tú, JAH, castigares, y en tu ley lo instruyeres;
Y tú, Jehová Señor, haz conmigo por amor de tu nombre: líbrame, porque tu misericordia es buena.
Ayúdame, Jehová Dios mío: sálvame conforme á tu misericordia.
Y huélgome por vosotros, que yo no haya estado allí, para que creáis: mas vamos á él.
Dícele Jesús: Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Y el Dios Omnipotente os dé misericordias delante de aquel varón, y os suelte al otro vuestro hermano, y á este Benjamín. Y si he de ser privado de mis hijos, séalo.
Guardad pues mis mandamientos, y ejecutadlos: Yo Jehová.
(Las cuales cosas son todas para destrucción en el uso mismo), en conformidad á mandamientos y doctrinas de hombres?
La Biblia ofrece sabiduría atemporal sobre el don profundo de la amistad. Los versículos explorados destacan la importancia de la lealtad, el amor desinteresado, el aliento y la rendición de cuentas dentro de estas relaciones vitales. Desde el lazo inquebrantable entre David y Jonatán hasta el énfasis proverbial en el consejo sabio y el hierro que afila al hierro, la Escritura enfatiza que la verdadera amistad es un tesoro que debe ser atesorado y cultivado. Que estos versículos sirvan como guía tanto para buscar como para ser un buen amigo, recordándonos que las amistades fuertes, construidas sobre fe y respeto mutuo, enriquecen nuestras vidas, fortalecen nuestros espíritus y proporcionan un apoyo invaluable a través de las alegrías y desafíos de la vida. Reflexiona sobre cómo puedes aplicar estos principios en tus propias relaciones, esforzándote por ser un amigo fiel, amoroso y de apoyo, tal como Cristo lo es para nosotros.