Versículos bíblicos sobre Tierra
Versículos bíblicos sobre Tierra
El concepto de «tierra» en la Biblia trasciende la mera geografía; representa herencia, promesa y la provisión de Dios. Explorar versículos sobre la tierra desbloquea una comprensión más profunda de nuestra herencia espiritual en Cristo. Desde la tierra prometida dada a los descendientes de Abraham hasta el nuevo cielo y la nueva tierra, la Escritura revela la intencionalidad de Dios en proveer un lugar para que Su pueblo prospere. Estudiar estos versículos nos permite apreciar las bendiciones tangibles que Dios otorga y cultivar un corazón agradecido por la tierra espiritual que Él ha preparado para nosotros eternamente. Que las Escrituras iluminen la significancia de la tierra, guiándonos hacia una apreciación más rica de la fidelidad de Dios y Sus promesas duraderas.
Most Helpful Verses
Begin your study with these carefully selected passages
Y ahora tus dos hijos Ephraim y Manasés, que te nacieron en la tierra de Egipto, antes que viniese á ti á la tierra de Egipto, míos son; como Rubén y Simeón, serán míos:
En aquel tiempo será traído presente á Jehová de los ejércitos, el pueblo tirado y repelado, pueblo asombroso desde su principio y después; gente harta de esperar y hollada, cuya tierra destruyeron los ríos; al lugar del nombre de Jehová de los ejércitos, al monte de Sión.
Y después de esto Josué los hirió y los mató, é hízolos colgar en cinco maderos: y quedaron colgados en los maderos hasta la tarde.
Scripture Passages
Y dijeron á Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto? ¿Por qué lo has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto?
Mirad, yo os he enseñado estatutos y derechos, como Jehová mi Dios me mandó, para que hagáis así en medio de la tierra en la cual entráis para poseerla.
Y como los Israelitas vieron muerto á Abimelech, fuéronse cada uno á su casa.
Por gigantes eran ellos también contados, como los Anaceos; y los Moabitas los llaman Emimeos.
Los contados de ellos, de la tribu de Benjamín, treinta y cinco mil y cuatrocientos.
Y venía Isaac del pozo del Viviente que me ve; porque él habitaba en la tierra del Mediodía;
Y murió Jobab, y en su lugar reinó Husam, de tierra de Temán.
Así tu siervo como tu sierva que tuvieres, serán de las gentes que están en vuestro alrededor: de ellos compraréis siervos y siervas.
Y habrá camino para las reliquias de su pueblo, las que quedaron de Assur, de la manera que lo hubo para Israel el día que subió de la tierra de Egipto.
Y de los bueyes, treinta y seis mil;
EMPERO Jehová había dicho á Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, á la tierra que te mostraré;
Y los hijos de José, que le nacieron en Egipto, dos personas. Todas las almas de la casa de Jacob, que entraron en Egipto, fueron setenta.
Y será aquel varón como escondedero contra el viento, y como acogida contra el turbión; como arroyos de aguas en tierra de sequedad, como sombra de gran peñasco en tierra calurosa.
Y el séptimo año la tierra tendrá sábado de holganza, sábado á Jehová: no sembrarás tu tierra, ni podarás tu viña.
Y Sarai, mujer de Abram, tomó á Agar su sierva egipcia, al cabo de diez años que había habitado Abram en la tierra de Canaán, y dióla á Abram su marido por mujer.
Porque la otra media recibió su heredad con los Rubenitas y Gaditas, la cual les dió Moisés de la otra parte del Jordán al oriente, según que se la dió Moisés siervo de Jehová:
Y á los que estaban en Rachâl, y á los que estaban en las ciudades de Jerameel, y á los que estaban en las ciudades del Cineo;
Maldito serás tu en la ciudad, y maldito en el campo.
Y partidos de Hasmona, asentaron en Moseroth.
Y Achîs le dió aquel día á Siclag. De aquí fué Siclag de los reyes de Judá hasta hoy.
¿Concebí yo á todo este pueblo? ¿engendrélo yo, para que me digas: Llévalo en tu seno, como lleva la que cría al que mama, á la tierra de la cual juraste á sus padres?
Tomó también Judá á Gaza con su término, y á Ascalón con su término, y á Ecrón con su término.
Señalad tres varones de cada tribu, para que yo los envíe, y que ellos se levanten, y recorran la tierra, y la describan conforme á sus heredades, y se tornen á mí.
Y hería David el país, y no dejaba á vida hombre ni mujer: y llevábase las ovejas y las vacas y los asnos y los camellos y las ropas; y volvía, y veníase á Achîs.
Y Josué mandó á los sacerdotes, diciendo: Subid del Jordán.
Subid á mí, y ayudadme, y combatamos á Gabaón: porque ha hecho paz con Josué y con los hijos de Israel.
Y él le respondió: Yo no iré, sino que me marcharé á mi tierra y á mi parentela.
Mas si no alcanzare su mano lo que basta para que vuelva á él, lo que vendió estará en poder del que lo compró hasta el año del jubileo; y al jubileo saldrá, y él volverá á su posesión.
Después los hijos de Judá descendieron para pelear contra el Cananeo que habitaba en las montañas, y al mediodía, y en los llanos.
Anda, y clama á los oídos de Jerusalem, diciendo: Así dice Jehová: Heme acordado de ti, de la misericordia de tu mocedad, del amor de tu desposorio, cuando andabas en pos de mí en el desierto, en tierra no sembrada.
Y reedificó Jeroboam á Sichêm en el monte de Ephraim, y habitó en ella; y saliendo de allí, reedificó á Penuel.
Y su término de la parte del mediodía fué desde la costa del mar Salado, desde la lengua que mira hacia el mediodía;
Los hijos de Salma: Beth-lehem, y los Nethophatitas, los cuales son las coronas de la casa de Joab, y de la mitad de los Manahethitas, los Soraitas.
Y Jehová te hará tornar á Egipto en navíos por el camino del cual te ha dicho: Nunca más volveréis: y allí seréis vendidos á vuestros enemigos por esclavos y por esclavas, y no habrá quien os compre.
Asimismo la campiña, y el Jordán, y el término, desde Cinereth hasta la mar del llano, el mar Salado, las vertientes abajo del Pisga al oriente.
Hízolo subir sobre las alturas de la tierra, y comió los frutos del campo, é hizo que chupase miel de la peña, y aceite del duro pedernal;
Helec hijo de Baana de Netophath, Ittai hijo de Ribai de Gabaa de los hijos de Benjamín;
Porque yo le introduciré en la tierra que juré á sus padres, la cual fluye leche y miel; y comerá, y se hartará, y se engordará: y volveránse á dioses ajenos, y les servirán, y me enojarán, é invalidarán mi pacto.
Disón, Ezer, y Disán: estos son los duques de los Horeos, hijos de Seir en la tierra de Edom.
FUÉ pues el rey Salomón rey sobre todo Israel.
Desde la promesa fundacional a Abraham hasta las visiones proféticas de una Tierra restaurada, los versículos de la Biblia sobre «Tierra» revelan una conexión profunda entre Dios, Su pueblo y el ámbito físico. Estas Escrituras destacan la soberanía de Dios sobre la creación, la importancia de la mayordomía y la representación simbólica de la Tierra Prometida como un lugar de bendición, provisión e herencia espiritual. La tierra significa no solo propiedad física, sino también un estado espiritual de pertenencia y cumplimiento en la gracia de Dios. Reflexionar sobre estos versículos nos desafía a considerar nuestra propia relación con el medio ambiente, nuestra responsabilidad de cuidarlo y el significado más profundo de «tierra» como símbolo de nuestra herencia ultimate en Cristo. Esforcémonos por ser mayordomos fieles de los recursos que se nos han confiado, buscando la voluntad de Dios para nuestras vidas y nuestra conexión con el mundo que nos rodea.