Versículos bíblicos sobre Restauración
Versículos bíblicos sobre Restauración
Sumérgete en el corazón del poder restaurador de Dios a través de estas Escrituras cuidadosamente seleccionadas. Comprender la restauración es primordial para captar el alcance completo del amor y la gracia de Dios. No se trata meramente de regresar a un estado anterior, sino de ser hecho completo, renovado y aun elevado más allá de lo que se perdió. Estos versículos iluminan la promesa de redención, ofreciendo consuelo y esperanza al saber que Dios está trabajando activamente para reparar lo roto, sanar heridas y restaurar relaciones. Abraza la verdad transformadora de que a través de la fe, nada se pierde verdaderamente, y que el deseo último de Dios es restaurarnos a nuestro propósito y gloria intencionados.
Versículos más útiles
Comienza tu estudio con estos pasajes cuidadosamente seleccionados
Y si no fuere redimida dentro de un año entero, la casa que estuviere en la ciudad murada quedará para siempre por de aquel que la compró, y para sus descendientes: no saldrá en el jubileo.
POR amor de Sión no callaré, y por amor de Jerusalem no he de parar, hasta que salga como resplandor su justicia, y su salud se encienda como una antorcha.
Mas tú, Jehová, ten misericordia de mí, y hazme levantar, y daréles el pago.
Scripture Passages
He aquí que yo vuelvo atrás la sombra de los grados, que ha descendido en el reloj de Achâz por el sol, diez grados. Y el sol fué tornado diez grados atrás, por los cuales había ya descendido.
Que quebrantaré al Asirio en mi tierra, y en mis montes lo hollaré; y su yugo será apartado de ellos, y su carga será quitada de su hombro.
Y mandó el rey que trajesen grandes piedras, piedras de precio, para los cimientos de la casa, y piedras labradas.
Y si el que santificó la tierra quisiere redimirla, añadirá á tu estimación el quinto del dinero de ella, y quedaráse para él.
Luego soltará la avecilla viva fuera de la ciudad sobre la haz del campo: así hará expiación por la casa, y será limpia.
Cuando alguna persona cometiere falta, y pecare por yerro en las cosas santificadas á Jehová, traerá su expiación á Jehová, un carnero sin tacha de los rebaños, conforme á tu estimación, en siclos de plata del siclo del santuario, en ofrenda por el pecado:
Y un hombre limpio tomará hisopo, y mojarálo en el agua, y rociará sobre la tienda, y sobre todos los muebles, y sobre las personas que allí estuvieren, y sobre aquel que hubiere tocado el hueso, ó el matado, ó el muerto, ó el sepulcro:
Y á Sara dijo: He aquí he dado mil monedas de plata á tu hermano; mira que él te es por velo de ojos para todos los que están contigo, y para con todos: así fué reprendida.
Y por su expiación traerá á Jehová un carnero sin tacha de los rebaños, conforme á tu estimación, al sacerdote para la expiación:
Y aconteció que desde el día que llegó el arca á Chîriath-jearim pasaron muchos días, veinte años; y toda la casa de Israel lamentaba en pos de Jehová.
Diga pues nuestro señor á tus siervos que están delante de ti, que busquen alguno que sepa tocar el arpa; para que cuando fuere sobre ti el espíritu malo de parte de Dios, él taña con su mano, y tengas alivio.
Y á la dedicación del muro de Jerusalem buscaron á los Levitas de todos sus lugares, para traerlos á Jerusalem, para hacer la dedicación y la fiesta con alabanzas y con cánticos, con címbalos, salterios y cítaras.
Ahora pues, dice Jehová, el que me formó desde el vientre por su siervo, para que convierta á él á Jacob. Bien que Israel no se juntará, con todo, estimado seré en los ojos de Jehová, y el Dios mío será mi fortaleza.
Y olvidarás tu trabajo, ó te acordarás de él como de aguas que pasaron:
La misericordia y la verdad se encontraron: la justicia y la paz se besaron.
Y el sacerdote hará expiación por toda la congregación de los hijos de Israel; y les será perdonado, porque yerro es: y ellos traerán sus ofrendas, ofrenda encendida á Jehová, y sus expiaciones delante de Jehová, por sus yerros:
Ciertamente á mí esperarán las islas, y las naves de Tarsis desde el principio, para traer tus hijos de lejos, su plata y su oro con ellos, al nombre de Jehová tu Dios, y al Santo de Israel, que te ha glorificado.
Y Booz dijo á los ancianos y á todo el pueblo: Vosotros sois hoy testigos de que tomo todas las cosas que fueron de Elimelech, y todo lo que fué de Chelión y de Mahalón, de mano de Noemi;
Y no les faltó cosa chica ni grande, así de hijos como de hijas, del robo, y de todas las cosas que les habían tomado: todo lo recobró David.
Entonces dijo Saúl: He pecado: vuélvete, hijo mío David, que ningún mal te haré más, pues que mi vida ha sido estimada hoy en tus ojos. He aquí, yo he hecho neciamente, y he errado en gran manera.
Y dijo Josué: ¿Por qué nos has turbado? Túrbete Jehová en este día. Y todos los Israelitas los apedrearon, y los quemaron á fuego, después de apedrearlos con piedras;
Y comieron toda la hierba de su país, y devoraron el fruto de su tierra.
Morará el lobo con el cordero, y el tigre con el cabrito se acostará: el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.
Muchas veces los libró; mas ellos se rebelaron á su consejo, y fueron humillados por su maldad.
Ruégoos que les devolváis hoy sus tierras, sus viñas, sus olivares, y sus casas, y la centésima parte del dinero y grano, del vino y del aceite que demandáis de ellos.
Jehová abre los ojos á los ciegos; Jehová levanta á los caídos; Jehová ama á los justos.
Yo soy el primero que he enseñado estas cosas á Sión, y á Jerusalem daré un portador de alegres nuevas.
Destruirá á la muerte para siempre; y enjugará el Señor toda lágrima de todos los rostros: y quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra: porque Jehová lo ha dicho.
Y el sacerdote tomará el cordero de la expiación por la culpa, y el log de aceite, y mecerálo el sacerdote como ofrenda agitada delante de Jehová;
Saca al blasfemo fuera del real, y todos los que le oyeron pongan sus manos sobre la cabeza de él, y apedréelo toda la congregación.
Si comprares siervo hebreo, seis años servirá; mas el séptimo saldrá horro de balde.
¿No me dijo él: Mi hermana es; y ella también dijo: Es mi hermano? Con sencillez de mi corazón, y con limpieza de mis manos he hecho esto.
Y por su expiación traerá á Jehová un carnero sin tacha de los rebaños, conforme á tu estimación, al sacerdote para la expiación:
Y Absalom respondió á Joab: He aquí, yo he enviado por ti, diciendo que vinieses acá, á fin de enviarte yo al rey á que le dijeses: ¿Para qué vine de Gessur? mejor me fuera estar aún allá. Vea yo ahora la cara del rey; y si hay en mí pecado, máteme.
Los hijos de Zattu, ochocientos cuarenta y cinco;
Oh Dios, haznos tornar; y haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos.
Cuando alguna persona cometiere falta, y pecare por yerro en las cosas santificadas á Jehová, traerá su expiación á Jehová, un carnero sin tacha de los rebaños, conforme á tu estimación, en siclos de plata del siclo del santuario, en ofrenda por el pecado:
Y un hombre limpio tomará hisopo, y mojarálo en el agua, y rociará sobre la tienda, y sobre todos los muebles, y sobre las personas que allí estuvieren, y sobre aquel que hubiere tocado el hueso, ó el matado, ó el muerto, ó el sepulcro:
Y subió el rey á la casa de Jehová, y con él todos los varones de Judá, y los moradores de Jerusalem, y los sacerdotes, y los Levitas, y todo el pueblo desde el mayor hasta el más pequeño; y leyó á oídos de ellos todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová.
Oh Dios, haznos tornar; y haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos.
Los versículos de la Biblia sobre restauración pintan un cuadro vívido del compromiso inquebrantable de Dios con la sanación, reconstrucción y renovación de lo que está roto. Desde la restauración personal después del pecado, como se ejemplifica en la promesa de Joel de años restaurados, hasta la gran visión profética de un Israel restaurado y una nueva creación, estos pasajes ofrecen una esperanza profunda. Nos recuerdan que independientemente de la profundidad de nuestras heridas o la extensión de nuestros fracasos, la gracia de Dios es suficiente para traer una restauración completa y duradera. Somos invitados a reflexionar sobre estas promesas, anclando nuestra fe en la seguridad de que nada está más allá de Su alcance. Que estos versículos nos inspiren a participar activamente en la obra restauradora de Dios, tanto en nuestras propias vidas como en el mundo que nos rodea, convirtiéndonos en agentes de sanación y reconciliación, reflejando Su amor ilimitado y poder redentor.