Versículos bíblicos sobre Buscando Orientación

Abominación es á Jehová el camino del impío: mas él ama al que sigue justicia.

Entonces dijo Moisés á Aarón: Esto es lo que habló Jehová, diciendo: En mis allegados me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado. Y Aarón calló.

Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios: á él oiréis:

Y aconteció que como acabaron de comer el trigo que trajeron de Egipto, díjoles su padre: Volved, y comprad para nosotros un poco de alimento.

Y Jehová salió al encuentro de Balaam, y puso palabra en su boca, y díjole: Vuelve á Balac, y así has de decir.

Aumentarás mi grandeza, y volverás á consolarme.

Y tornándose los dos varones, descendieron del monte, y pasaron, y vinieron á Josué hijo de Nun, y contáronle todas las cosas que les habían acontecido.

Dichosos los que guardan juicio, los que hacen justicia en todo tiempo.

Monte de Dios es el monte de Basán; monte alto el de Basán.

Esperé yo á Jehová, esperó mi alma; en su palabra he esperado.

Y David iba adelantando y creciendo, y Jehová de los ejércitos era con él.

Porque no sabe lo que ha de ser; y el cuándo haya de ser, ¿quién se lo enseñará?

Dijo más David á Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y ponlo por obra; no temas, ni desmayes, porque el Dios Jehová, mi Dios, será contigo: él no te dejará, ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.

Y levantóse David de mañana, él y los suyos, para irse y volverse á la tierra de los Filisteos; y los Filisteos fueron á Jezreel.

Tuyo soy yo, guárdame; porque he buscado tus mandamientos.

Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no te olvides ni te apartes de las razones de mi boca;

Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; mas en la multitud de consejeros se afirman.

Muévete y despierta para mi juicio, para mi causa, Dios mío y Señor mío.

Pregunta á tus criados, que ellos te lo dirán. Hallen por tanto estos criados gracia en tus ojos, pues que venimos en buen día: ruégote que des lo que tuvieres á mano á tus siervos, y á tu hijo David.

Trájolos pues á la presencia del rey de Moab, y habitaron con él todo el tiempo que David estuvo en la fortaleza.

Entonces se levantó Jonathán hijo de Saúl, y vino á David en el bosque, y confortó su mano en Dios.

No reprendas al escarnecedor, porque no te aborrezca; corrige al sabio, y te amará.

Y vinieron luego á la fortaleza de Tiro, y á todas las ciudades de los Heveos y de los Cananeos; y salieron al mediodía de Judá, á Beer-seba.

JEHOVÁ, á ti he clamado: apresúrate á mí; escucha mi voz, cuando te invocare.

Porque su Dios le instruye, y le enseña á juicio;

Jehová conoce los pensamientos de los hombres, que son vanidad.

Y Josué mandó á los sacerdotes, diciendo: Subid del Jordán.

Más preciosa es que las piedras preciosas; y todo lo que puedes desear, no se puede comparar á ella.

Bienaventurado aquel en cuya ayuda es el Dios de Jacob, cuya esperanza es en Jehová su Dios:

Porque de Jehová es el reino; y él se enseñoreará de las gentes.

Y dijo Josué á todo el pueblo: He aquí esta piedra será entre nosotros por testigo, la cual ha oído todas las palabras de Jehová que él ha hablado con nosotros: será, pues, testigo contra vosotros, porque no mintáis contra vuestro Dios.

Y fué hecho saber á Salomón que Joab había huído al tabernáculo de Jehová, y que estaba junto al altar. Entonces envió Salomón á Benaía hijo de Joiada, diciendo: Ve, y da sobre él.

Porque nuestras rebeliones se han multiplicado delante de ti, y nuestros pecados han atestiguado contra nosotros: porque con nosotros están nuestras iniquidades, y conocemos nuestros pecados:

El camino del justo es rectitud: Tú, Recto, pesas el camino del justo.

LOS hijos de los profetas dijeron á Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.

Si tratáremos de entrar en la ciudad, por el hambre que hay en la ciudad moriremos en ella; y si nos quedamos aquí, también moriremos. Vamos pues ahora, y pasémonos al ejército de los Siros: si ellos nos dieren la vida, viviremos; y si nos dieren la muerte, moriremos.

Y habló Jehová á Moisés y á Aarón, diciendo:

Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y ungiólo de entre sus hermanos: y desde aquel día en adelante el espíritu de Jehová tomó á David. Levantóse luego Samuel, y volvióse á Rama.

Mi amado es semejante al gamo, ó al cabrito de los ciervos. Helo aquí, está tras nuestra pared, mirando por las ventanas, mostrándose por las rejas.

Y la carne que tocare á alguna cosa inmunda, no se comerá; al fuego será quemada; mas cualquiera limpio comerá de aquesta carne.